El espectáculo inició con un homenaje a Aretha Franklin, quien fue diagnosticada con cáncer pasado diciembre y un mensaje de la diva en el que lamentó no haber podido asistir a la ceremonia.
Ricky Martin, con unos llamativos pantalones plateados, presentó a Lady Gaga quien dio a conocer su nuevo sencillo Born this way saliendo de un huevo para luego dar paso a una estudiada coreografía.
El premio a Mejor actuación pop de duo o grupo fue para la banda de San Francisco Train, que precedieron a la actuación de la banda inglesa Muse quien se presentaba por primera vez en los escenarios del Grammy.
El adolescente Justin Bieber llenó el escenario del Staples Center en Los Ángeles de luz y baile, primero cantó su éxito Baby en acústico para luego dar paso a un gran número con fuegos artificiales en el que hizo duo con Willow Smith, la hija de Will Smith y Jada Pinket Smith, cantando I Wouln’t never say never y Usher, quien apadrinó a Bieber para empezar su carrera musical, dio el toque final con su interpretación de OMG su último sencillo.
Uno de los momentos más simpáticos de la velada fue cuando Cee Lo Green, vestido coloridamente, realizó un dueto con la actriz Gwyneth Paltrow y un grupo de títeres, quienes cantaron The Lady Killer.
La revelación de este año, Bruno Mars, se apoderó del escenario con su presentación al igual que Mick Jagger que cantó Everybody needs someone to love junto con Rafael Saadiq en la guitarra.
A pesar de ser el gran derrotado de la noche, Eminen que optaba a diez premios y se llevó sólo uno por Mejor álbum de rap, encendió el escenario junto con Rihanna e interpretaron su gran éxito Love the way you are con llamas que salían de unas pantallas que estaban en el escenario, luego de irse Rihanna compartió tarima con el Dr. Dre.
Barbra Streisand también participó en el evento y emocionada interpretó Evergreen para recibir una gran ovación del público asistente.
La barbadense Rihanna volvió a salir al escenario pero esta vez para acompañar al rapero Drake, Lady Antebellum volvió a subir a escena para recoger su último premio de la noche en el apartado de Mejor canción del año.
Para finalizar la banda de rock Arcade Fire ofreció un vigoroso número y cerraron con broche de oro el espectáculo al subir a recoger el premio por Mejor álbum del año dejando en el camino una vez más Eminen. Los canadiense también estaban nominados en otras dos categorías y despidieron los premios con otra canción.